Victoria de garra para nuestro benjamín A por 1 - 3 en casa del Andalucía Este, que se aferró en defensa para intentar conseguir la misma proeza de la ida, pero esta vez el San Roque no estaba dispuesto a dejarse más puntos por el camino, para poder luchar por el ascenso hasta el final.
La primera parte comenzó muy floja por parte de nuestros chavales. Por muy bueno que sea un equipo, jamás se podrá competir con una hora de entrenamiento, y es a lo que nos tenemos que atener debido al mal estado de nuestro campo, en el cual caen dos gotas y se encharca. Y mientras tanto, seguiremos aplaudiendo que, en dos años, han venido a coger medidas para ponernos la luz y el agua varias veces. Con esto, el equipo tuvo que ir superando su falta de ritmo poco a poco, y así se fue haciendo poco a poco con el partido, que dominaba en primera instancia los visitantes. La superioridad con la que comenzó a jugar no se plasmaba en goles, y las llegadas no se finalizaban. Así que, en una contra, el equipo local se iba a encontrar con un balón muerto dentro del área para finalizar en gol y adelantarse en el marcador en una primera parte en la que no mereció nada ninguno.
Los chavales no quieren perder más puntos de forma absurda, así que salieron manos a la obra a remontar esto. Se encerró al equipo verdiblanco en su área, y los de morado en esta ocasión, esta vez sí finalizaban con disparos, aunque no se transformarían en gol hasta mediada la segunda mitad, que Pablo lanzaría una falta al palo, para que tras tocarlo, entrara la pelota dentro. El San Roque quería más, y poco más tarde, una serie de saques de esquina acabaría con Pablo peinando la pelota para que Nacho en el segundo palo rematara perfectamente al fondo de la portería. Poco más tarde, otra buena internada de Pablo se convertiría en centro para Nacho, que remató, y tras tocar con la mano un defensa, se mete en la portería, aunque el árbitro dio penalti. Juan Carlos se encargaría de transformarlo, y poner el definitivo 1 - 3 en el marcador, aunque quedó tiempo para fallar alguna ocasión más que hubiera dado más ventaja en el marcador.
Partido ganado, sacado con garra y fuerza, demostrando que la actitud y las ganas son clave para poder conseguir cualquier objetivo. Tres puntos vitales para aferrarnos a ese tren llamado ascenso, del que no queremos bajar, y estamos dispuestos a luchar hasta el final para conseguirlo. Aunque el tiempo no colabore, aunque con el campo no se pueda hacer más. Pero ahí tendremos la receta para intentarlo: trabajo, actitud e intensidad.
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