Nueva derrota del equipo infantil B por 4 - 12, esta vez frente a un buen Torreblanca, que con un equipo de gran talla y muchísima velocidad arriba, aspira a estar en la zona más alta de la tabla.
La primera parte comenzó fría, y fruto de esta pájara mañanera iba a llegar el primer tanto visitante rápidamente, por medio de un corner directo que entre Javi Marfil y Luis no llegan a entenderse y el balón entra ridículamente. Se ponía el partido cuesta arriba desde un principio, aunque el equipo verde no parecía tener intenciones de levantarlo. Con esto, se iba a ver un partido en general flojo, blando por parte del San Roque, por lo que no tardarían en llegar más goles para los visitantes, acabando la primera parte con un resultado de 0 - 5. Nada que objetar a este resultado, porque el equipo sanroqueño tiró literalmente la primera parte, no mereciendo prácticamente nada.
La segunda parte cambió de guión. El entrenador visitante dio buena muestra de la confianza en sus futbolistas atacantes, y retrasó a su equipo para dejar paso al juego a la contra, sabedor de la mayor velocidad de sus futbolistas, sobretodo arriba. Con esto, iba a llegar pronto el 0 - 6. A partir de aquí, el San Roque se dispuso a demostrar que son capaces de jugar bien, y que si lográsemos ser constantes en el nivel de juego, muchos puntos caerían de nuestro lado. Los dos primeros tantos iban a llegar por parte de Javi Marfil, muy similares; los dos de faltas, aunque el primero fue de mayor belleza. A la contra, iban a llegar 3 más para los azules, aunque ya el juego lo ponían los verdes. Muchas ocasiones desperdiciaron los locales para dejar un marcador más ajustado, aunque se lograrían dos goles más, el primero tras una buena combinación entre Xavi, Pedrazo y marcó Guille, y el segundo tras una grandísima carrera de Alejandro Jiménez, que puso un pase perfecto para que Pedrazo marcara, llevándose por delante la pierna del portero (y yo creo que lo que haga falta). Con el 4 - 9, el San Roque confió en cerrar el marcador con otro color, pero en los últimos minutos el Torreblanca iba a hacer sangre de un equipo que no mereció en la segunda parte tantos goles, llegando hasta el 4 - 12 definitivo con el que se llegó al final.
Saco del partido varias conclusiones para trabajar: la primera es que no se puede ir tan blando al balón, ya que se han llevado innumerables rebotes de balones divididos; otra es que hay que trabajar muchísimo los balones parados, donde se mezcla lo anterior con un mal seguimiento del rival; la siguiente es una mayor claridad a la hora de combinar, mayor compenetración; y por última, la nombrada ya anteriormente, ser constantes en el juego. Resaltar un gran partido de Javi Marfil en el medio del campo, donde, cuando quiere, es el mejor, y Pedrazo, superlativo ganado debido a que no le importa lo que haya enfrente si el balón está de por medio.
Hay que ir pensando ya en el próximo partido, pero trabajando las anteriores premisas, pienso que los puntos van a llegar muy pronto, estoy seguro. Confío en vosotros chavales.
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